CUZCO, CAPITAL DEL IMPERIO INCA

Aunque ayer por la tarde ya tuvimos un apunte de lo que podía ser esta ciudad, hoy toca conocer algo más del Cuzco, la capital del antiguo imperio inca.

Y empezamos por un impresionante monumento, visto desde abajo, que está enfrente de nuestro hotel. Se trata del Convento de Santo Domingo, que la orden dominica construyó sobre el recinto sagrado de Qorikancha, un antiguo palacio inca y centro de culto al dios Sol. (La foto está tomada ya anocheciendo.)

Recorremos el interior, visitando el claustro y las diversas dependencias para, a continuación, tomar nuestro vehículo y dirigirnos a los alrededores de la ciudad. Antes de que nos demos cuenta ya estamos otra vez a casi 4.000 metros de altitud.

Tras visitar una de las antiguas fortalezas incas que rodeaban la ciudad, Puca Pucara, bajar a una cueva donde depositaban a sus muertos (en cuclillas) y pasar por una instalación donde podemos observar cómo trabajan la artesanía, tanto textil como en plata, llegamos al impresionante lugar llamado Saqsaywamán, una imponente muestra de la arquitectura militar incaica.

Me parece interesante reproducir aquí la leyenda que aparece bajo el plano del lugar situado a la salida, con un texto escrito en 1534. Los incas fueron capaces de, primero, diseñar la instalación, luego tallar las enormes y pesadas piedras en la cantera situada en lo alto de la montaña, trasladarlas después hasta el lugar y, finalmente, colocar cada una en su sitio pesando como pesaban varias toneladas.

Regresamos a Cuzco para culminar el recorrido de hoy en la Plaza de Armas y la Catedral.

Al visitar el templo católico más importante de la ciudad se visitan en realidad tres iglesias que se comunican entre sí.

Entramos por la de la Sagrada Familia, pasamos a continuación a la Catedral Basílica de la Virgen de la Asunción y salimos por la iglesia del Triunfo. Una muy interesante visita de la que no podemos dar testimonio gráfico pues están prohibidas las fotos en el interior.

Anochece ya cuando salimos y nos topamos con un pub en cuya planta superior hay un estrecho balcón-terraza donde disfrutamos de la magnífica vista en compañía de una Culqueña, sabrosa cerveza local.

Y como ya va refrescando, decidimos trasladarnos no lejos, donde nos han recomendado un restaurante situado en privilegiado lugar para cenar. 

¿Gustáis?